Si se dan una vuelta por las noticias, se darán cuenta que Venezuela está a punto de entrar a las urnas a votar por presidente…
La mayoría de las notas que he leído, hablan de lo mismo: MIEDO a votar en contra de Chávez, y amenazas por parte de este sujeto, de todo tipo. Desde dejar a quien vote contra el sin trabajo, hasta cosas aun peores. Incluso se fusilaron el eslogan del contrincante «¡Atrévete!», añadiéndole un intimidante «…y las pagarás».
¿Esto es un presidente de la República? ¿Eso es lo que tanto vociferan y apoyan los supuestos izquierdistas? ¿Eso hubiéramos querido para México? Yo creo que no. Apenas si estamos logrando salir de un régimen totalitario –aunque disfrazado– de 77 años. Creo, al igual que muchos, que para allá íbamos. Con un dizque Presidente Legitimo, necio, ciego de ambición, y con ideales caducos que la historia ha demostrado, son solo eso: ideales, y que en la práctica solo sirven para empobrecer pueblos, no veo que otra cosa nos podía deparar.
Es curioso que, al menos en este país, la mayoría de los que se hacen llamar izquierdistas son gente que se ha beneficiado del capitalismo. Qué fácil, lo tienen todo, así es fácil adoptar poses. Ahí está la Poniatowska: según ella muy izquierdista y fomentando el repudio a los «ricos» (incluso aquellos que se han partido la madre para tener lo que tienen), pero con sus vestidazos de El Palacio de Hierro. Claro, ¡ha ganado mucha lana con sus libros! ¿Por qué, si se dice tan socialista, no los regala?.
Ahora Venezuela tendrá que derramar mucha sangre para volver a la vida a las instituciones que el gorilón ese, destruye a su antojo, igualito a lo que quería hacer el tabasqueño.
* Fuente de referencia: Articulo en El Universal