Cierto día de diciembre, iba el marungo con veintitantos años encima, pero con cara de niño de primaria, saliendo de Walmart Plaza México tranquilamente acompañado de su primo David, cuando de pronto:
– ¡¡JO JO JO!! (uta madre, ¡ya me vio el Sanchoclós! ¡¡¡escóndeme, gordo!!!) ¡¡¡FELIZ NAVIDAD!!! (no pos, feliz navidá)…
– JO JO JO ¿CÓMO TE HAS PORTADO ESTE AÑO, MIJITO?
– Pos, bien… (si me dejas irme me portaré mejor, ¡lo prometo!)
– JOO JO JO ¿HAS SIDO BUENO? ¿QUIERES MUCHO A TU PAPI Y A TU MAMI?
– Sí… (sí, cabrón, ¡y también a mis hijos! nomás porque no tengo jajajajaja)
– ¿Y A MÍ ME QUIERES MUCHO?
– Pos… sí (Ni te conozco, hijo de la chingada, por qué te he de querer… pero bueno)
– Y ¿QUÉ VAS A QUERER QUE TE TRAIGA ESTE AÑO?
– mmmhhh… (¡una mona de carne y hueso!)
– ¿Y ME EXTRAÑASTE EN TODO EL AÑO?
– … (ya fue mucho ¿¿¿no, cabrón??)
– ¡FELIZ NAVIDAD, CHAPARRITOOOO! TE VOY A TRAER TODOS TUS REGALOS ¡JOO JO JO!
– … (ándale pues, no tengas pendiente)
Terminado este penoso encuentro, y apenas retirándose el mentado sanchoclós, ambos estallaron en carcajadas, morados por la risa contenida por tanta mamada.
¡Feliz Navidad, zoquetes!
Jajajajajajajajajajajajaja hubieran tomado video!! Jajaja q risa
Ahora si me hiciste derramar lagrimas doradas de risa! ahh che caifo!
Este queria que el master se le sentara en las piernas =(